Si eres una de las muchas personas que se han apuntado al paro durante el brote de coronavirus – la comunidad de Madrid ya tenido alrededor de 20.000 aplicaciones online en tan solo cuatro días – probablemente te estés planteando lo que vas a hacer en seguida. Quizás un cambio de carrera, o empezar algo nuevo por tu cuenta, o volver al mismo empleo en una economía que, tarde o temprano, tendrá que recuperarse. Y si te decantas por la primera opción, te dejamos un sugestión: invertir en una formación para contables.
¿Porqué invertir en una formación para contables? Porque todas las empresas necesitan de contables, además de una multitud de autónomos perdidos entre todas sus obligaciones con la Hacienda y la Seguridad Social. Es cierto que con una sola formación no podrás registrarte como experto de contabilidad – pero sí podrás hacer otras funciones menos específicas y que son igualmente necesarias. Además, puedes encargarte de servicios puntuales para entregar el IRPF y otros impuestos que nos tocan a todos.
¿No te llegan estos motivos? Pues si te gusta ir a por libre, acuérdate que ser contable te permite trabajar por tu propia cuenta. Por supuesto que eso también conlleva sus riesgos, pero es una opción que debes considerar si te gustaría tomar las riendas de tu futuro. Y, si te apetece, puedes trabajar incluso desde el confort de tu casa: la mayoría de los contables solo tiene que recoger documentos de sus clientes, y raramente reciben clientes en su oficina. Ya por no decir que, para empezar el negocio, te ahorras el alquiler de un local.
¿Te suena bien? Si te imaginas a hacer servicios de contabilidad, o si crees que te vendría bien para entender mejor el funcionamiento de tu propio negocio, apúntate a una formación para contables. Puedes buscar un explicador online y aprovechar estos días para acordar de la pesadilla del coronavirus con una oportunidad en tus manos.