Si vas a contratar a un abogado por primera vez, es importante que conozcas tus derechos y deberes como cliente. Aquí te detallamos los principales:
Derechos del cliente
Dignidad, respeto y justicia: tienes derecho a ser tratado con dignidad, respeto y justicia, independientemente de si eres inocente o culpable y del tipo de delito que puedas haber cometido. A pesar de estar acusado de un crímen, los derechos humanos siempre prevalecen. Por eso, todos los acusados tienen derecho a un abogado y a condiciones dignas en prisión.
No discriminación: ningún cliente puede ser discriminado por motivos religiosos, políticos, culturales, étnicos, orientación sexual, identidad de género, nivel social o capacidad cognitiva. Todos los clientes tienen derecho a un trato igualitario y a una representación justa.
Privacidad y confidencialidad: otro derecho del cliente al contratar a un abogado es la total confidencialidad y privacidad. El deber del secreto profesional del abogado es absoluto y puede ser sancionado por la ley o mediante un proceso civil. El abogado solo puede romper el secreto profesional con autorización y en casos excepcionales, como en el caso de blanqueo de capitales o financiación de actos terroristas.
Servicio de calidad: el abogado tiene el deber de proporcionar un servicio de calida. Debe representar al cliente de la mejor manera posible dentro de lo mejor de sus capacidades, con la mayor competencia, eficiencia y empatía posible. Por lo tanto, otro derecho del cliente es recibir una buena defensa.
Deberes del cliente
Sin embargo, no todo son derechos. Después de tener un abogado (ya sea proporcionado por el estado o contratado), también debes conocer tus deberes como cliente. Estos son los cuatro deberes más importantes del cliente hacia su abogado:
Proporcionar información: el cliente tiene el deber de proporcionar toda la información relevante al abogado, no solo sobre sí mismo, sino también sobre los actos y todas las personas involucradas (dentro de su conocimiento). Ocultar detalles a tu abogado, de hecho, podría perjudicar tu defensa. Recuerda que todo lo que le cuentas al abogado está protegido por el secreto profesional del que hablamos anteriormente.
Respetar las reglas del tribunal: la justicia impone reglas de comportamiento a todos los funcionarios de los tribunales. Por lo tanto, aunque no haya una regla específica al respecto, se espera que el cliente también respete las reglas de funcionamiento del tribunal. En otras palabras, debes comportarte de manera respectuosa y educada. Además, nunca se debe dañar lo que es propiedad pública.
Cumplir con horarios y citas: el cliente también tiene el deber de asistir a las reuniones programadas dentro de los horarios establecidos. De lo contrario, el abogado puede cobrar por estas reuniones, incluso si no se han llevado a cabo. De igual manera, también debes asistir puntualmente a cualquier citación emitida por el tribunal. El abogado no puede responsabilizarse de esto.
Pago y cumplimiento del contrato: el cliente también tiene el deber de cumplir el contrato establecido con el abogado, especialmente en lo que respecta a honorarios. La falta de pago es motivo suficiente para que el abogado renuncie a representarte. Por lo tanto, establecer los precios y honorarios es una de las consideraciones que debes tener desde el principio.
Finalmente, hay algo que no se encuadra ni en los derechos ni en los deberes del cliente, pero que puede influir en todo el proceso. Los abogados tienen reglas aplicables en relación con el conflicto de intereses, por lo que no pueden representar a dos clientes con los mismos intereses. Si sospechas que esto puede ocurrir, habla directamente con tu bufete de abogados.
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