Enemigos silenciosos en casa.

En la comodidad de nuestro dulce hogar pensamos que no hay nada que nos pueda perturbar. Procuramos adaptar nuestra casa de acuerdo a nuestras necesidades y gustos, creando un ambiente para el disfrute y confort, bien sea para los que viven individualmente, en pareja o en familia. 

Pero, ¿Realmente no hay peligro dentro de nuestra casa? Muchas personas viven con la plena certeza de que en su vivienda no hay nada que los pueda llevar a una situación de peligro, aunque hay que tener cuidado porque si lo existe, no lo notamos debido a que estas amenazas son silenciosas, pero pueden afectar nuestra salud y poner en riesgo nuestra vida.

¿Qué tipo de amenazas?

Hablamos nada más y nada menos de enemigos silenciosos o que no hacen ningún tipo de ruido, como:

Roedores: Estos pequeños animales como ratas y ratones son muy sigilosos y a pesar de su tamaño realizan atrocidades, llevan consigo gran cantidad de bacterias, ellos siempre están en busca de comida, pueden pisar comida, morder empaques de alimentos como granos o arroz y contaminarlos. Además de que sus heces y orinas son tóxicas y generan mal olor.

Insectos: En este ámbito nos referimos principalmente a las cucarachas, invertebrados que para muchas personas resultan desagradables. Estas también buscan alimentarse y traen consigo bacterias causantes de enfermedades. Otro tipo de insectos son los zancudos que con su picadura pueden transmitir virus potencialmente patológicos y moscas contaminantes de alimentos. 

Virus, bacterias y hongos: Microorganismos invisibles para el ojo humano que pueden ingresar al organismo, afectar al sistema inmune y causar enfermedad. 

¿Cómo eliminarlos y prevenir su aparición?

Lo más importante es una limpieza impecable y constante. Estos seres vivos perjudiciales siempre conviven en ambientes en donde hay mucho desorden y suciedad, la mejor manera de combatirlos es la limpieza con productos para tal fin, como: cloro, desinfectante, jabón líquido y en polvo, antibacteriales y otros similares.