Cómo preparar una dieta BARF para perros

Alvan Nee

La dieta BARF es una dieta alternativa para perros a base de alimentos crudos, que busca imitar los valores alimentarios y nutricionales a los que tendrían acceso en su hábitat natural, sin comidas procesadas. 

Algunos veterinarios recomiendan la dieta BARF para perros con sensibilidades alimentarias y argumentan que aumenta la esperanza de vida media de nuestras mascotas porque excluye conservantes y proteínas de baja calidad. Si eres nuevo en esto, te explicamos cómo hacer una dieta BARF para perros en 7 pasos. Aunque lleva su tiempo, vale la pena para cuidar mejor de tu mascota.

70% de carne cruda

En una dieta BARF para perros, la carne cruda debe ser el 70% de la dieta. Usa carne de músculo o carne del corazón para lograr esto.

10% de huesos "comestibles"

Aproximadamente el 10% de los alimentos crudos deben ser huesos, porque son una fuente de cálculo, fósforo y otros nutrientes esenciales para el perro. Una buena alternativa son los huesos de pollo (siempre que no hagan que el perro se ahogue) y los llamados "huesos tiernos".

7% de verduras

Todos habemos escuchado el mito de que los perros no "necesitan" ni "deben" comer verduras. Sin embargo, hasta un 7% de la dieta pueden ser verduras, como verduras de hoja verde o zanahorias. En el caso de perros mayorcitos con problemas renales, esta cantidad puede subir a cambio de reducir la proteína cruda.

5% de hígado

Ya hemos hablado de la carne cruda y del corazón, pero el hígado – que también existe, en mayor o menor medida, en la mayoría de los alimentos para animales – es fundamental para la dieta saludable de los perros. Esto se debe a que el hígado es rico en vitamina A: un 2% de hígado puede ser suficiente para satisfacer las necesidades nutricionales de un perro con problemas renales.

5% de otros órganos

Además del hígado, existen otros órganos (riñones, cerebro, pulmones, mollejas, etc.) que pueden aportar minerales y vitaminas a tu perro. Estos órganos pueden representar hasta un 5% de la dieta BARF del perro.

2% semillas y frutos secos

Las semillas y los frutos secos son ricos en ácidos grasos, por lo que también tienen un lugar en la dieta saludable de un perro. Sin embargo, es necesario remojarlos y molerlos previamente.

1% fruta

La fruta es rica en azúcar, así que ten cuidado con la cantidad de fruta que le das a tu perro. En una dieta BARF, no se recomienda superar al 1%.